La motivación surge cuando existe un necesidad, esfuerzo y metas organizacionales. Este proceso se puede ver mejor en el siguiente esquema.
El proceso comienza cuando una necesidad altera el equilibro del individuo. Se trata de un estímulo que la persona percibe con una necesidad, la presencia de este desencadena el proceso motivacional.
La necesidad insatisfecha provoca una situación de tensión que impulsa al individuo a establecer un objetivo para poder conseguir la meta que desea. Es decir, el impulso genera un comportamiento de búsqueda, en el cual la persona tiene un objetivo que perseguir y por tanto se convierte en una meta que trata de alcanzar.
Todo este proceso nos lleva a que el comportamiento del individuo o sus acciones tiene que estar concentrado dentro de la organización(empresa). Si en un posible caso no fuera así, la persona hace un esfuerzo que no favorece para nada en las metas que la empresa requiere. Pero si el individuo realiza una serie de acciones dentro de la empresa, le lleva a obtener unos resultados tanto positivos como negativos.
Una vez conseguido el objetivo se produce la satisfacción en la persona y al mismo tiempo el equilibrio(bienestar inicial) . Pero, la necesidad no satisfecha o surgimiento de otra reiniciará el proceso.
Hay muchas teorías que explican la motivación que las empresas tienen que llevar a cabo para poder motivar a sus trabajadores.
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